Confidencial

Recupero un post que censuré en su día para disfrute y goce de todos vosotros...

Me pregunto si es noticia ser una joven precaria. Creo que no, pero eso no justifica un silencio estéril con el que nunca he comulgado y que, por supuesto, no pienso practicar hoy. Pues sí, resulta que el pasado lunes se inauguró la nueva sede del magnánimo, prestigioso e ilustrísimo Instituto Cervantes que, como ustedes saben, es -o pretende ser- el estandarte de la lengua y la cultura panhispánica. Pero sólo de puertas para afuera, ¿eh? Porque las fotos de las personalidades que acudieron al acto quedarían monísimas pero lo que se dice el proletariado que levanta dicha institución todavía está esperando que le paguen el mes de mayo. Sí, sí. Estaré sin un duro y con una patita en la calle pero me he quedado bien a gusto.
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[La pobre profe que nos lo cuenta trabaja como docente en régimen de colaboración. Recibió el cheque del mes de mayo nada más y nada menos que el 12 de junio cuando los bancos ya habían cerrado. Escribió una carta de quejas al director pero éste ni se dingó a responderla. Para continuar con su maltrecha vida tuvo que pedir varios préstamos a familiares y amigos]